El apego en el Dominante. No siempre decimos la verdad, toda la verdad, es cierto, lo que no significa que mintamos. Lo que pasa es que hay realidades que la confesión nos haría daño porque nos posicionaría en un lugar para el que no estamos preparados. Y, en ese momento, nos sentimos inmensamente solos. Solos porque no hay quien nos escuche con la paciencia que requiere una escucha sin censuras.
Soy la sumisa de mi unico Cachorro Mucho sexo y un poco de violencia entre madre e hijo-amo. Esta es la 2da parte A mis casi 36 años yo era una mujer normal, increíblemente decente y Corriente, muy sencilla mi hijo que ya ustedes conocen algo de el por mi anterior relato es un joven que me había salido increíblemente Burdégano y Dominante y que incluso me hizo su mujer y me encanta que él me considere su esposa. Mi hijo me llamo la atención y me cacheteo varias veces dijo que desde ese momento el porno estaba permitido en casa, volvió a poner la película donde se veía a una joven rubia comerse aun la empuñadura la polla de un hombre de color. El muy gorrino se rio y me dijo que la limpiara con la lengua, que se iba a dormir. Pasaron los días, ya no se conformaba con que los dos anduviéramos desnudos y me follara, en cualquier lado, todavía se pajeaba cuando quería, delante mía al final él es amo de la casa, una noche le recrimine su actuación y allí empezó lo peor. Avance y me puse de rodillas delante de mi sonriente cachorro, sin decir palabra, agarré la gallina que éste me ofrecía y me la metí en la boca. Estaba absorta en mi labor de lamedura nunca quise hacerlo con él, seguiala polla de mi hijo enterrada en mi boca.