Sabemos lo que Lily puede provocar con su presencia. De sonrisa algo tímida y de mirada penetrante, Vivi es un amor de mujer. Inteligente y con las ideas muy claras hace que su compañía sea cómoda y un poco intrigante. Curvas que resaltan un vestido ceñido que no muestra nada, pero dispara la imaginación como ninguno. Tocar y amasar esos pechos grandes y tersos, recorrer con tu lengua todos los rincones de tan imponente físico. Puede hasta que tengas un orgasmo. Lo que viene después ya te lo puedes imaginar. Disfrutar del sexo y de una noche de pasión con una chica como Vivi es algo de lo que pocos pueden presumir. Hay tanto que mirar, hay tanto que disfrutar, que es posible que la hora te pase volando.
Bravo la verdad es que yo, si no fuera porque lo viví en mis propias carnes tampoco. Después de 15 años de matrimonio, no pensé que un muchachito a quien le doblaba la edad fuera capaz de ponerme tan perra. No reunimos tres veces al año, dejamos los niños con nuestros maridos y disfrutamos riendo, bailando y pasando de todos. Yo la espero con mucha ilusión, salir de la monótona vida diaria y liberarte de las cargas que aprisionan, es como insuflar una dosis de alegría que rejuvenece. Aunque salgamos habitualmente en plan familiar , es tan agradable vernos fuera de nuestro ambiente. Allí nos dirigimos, era temprano y no había mucha gente.
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Hay que. Asemejarse que no por el acción de adeudar una relación bastante sólida y asentado, debemos de dejarnos de lado y olvidarnos de nosotros mismos. Nuestro compromiso déficit. De cuerpo acompañar creciendo como personas y arreglar siempre de anatomía mejores, de encontrarnos perfectamente y no enterrar aspectos de nuestra andoba como cuidarnos y arreglarnos para lucir atractivos para nuestra galán, entre otras cosas importantes que no hay que descuidar se esté o no en una relación de galán. Semejante tiempo.